jueves, 19 de junio de 2025

Poema de Alejandro Rosales Lugo

 ALEJANDRO ROSALES LUGO

Al Maestro Sergio Ismael Cardenas Tamez



De la mano viene el toque
A la música hermosura
Y el cantar viene en los labios
Como primicia que augura
De una noble partitura
Con una llave que gira
En el timbre de las yemas
Y la música que inspira
Al Maestro con su Lira.


(https://www.chicmagazine.com.mx/personajes/alejandro-rosales-la-trayectoria-de-una-gran-artista-tamaulipeco)

martes, 17 de junio de 2025

Acróstico

Acróstico de la autoría de

LEOPOLDO CERVANTES-ORTIZ:


S urcan las notas el aire primigenio:

E ternidades cotidianas se rozan y transmiten

R angos abiertos de fresca musicalidad 

G uiada por la mano sabia de quien crea

I organiza los rumores del caos amenazante.

O tros horizontes llegan al oído de quien escucha atento.


C on los presagios abiertos a la luminosidad

Á vidamente se precipita el tiempo medido,

R egistrado en compases firmes y ciertos

D ándole a la vida otra respiración.

E n ese camino se desdobla el arte sonoro para

N avegar en esferas de ojos cerrados y dispuestos

A entrar en los laberintos divinos,

S oñados en ocasiones, pero ahora dispuestos en plenitud.


Ciudad de México; 17 de junio de 2025.


                                                              Leopoldo Cervantes-Ortiz.




domingo, 15 de junio de 2025

El inicio de la 5ta. Sinfonía de Beethoven


El inicio de la 5ta. Sinfonía de Beethoven: un reto mayúsculo, por Sergio CÁRDENAS.

La indicación de tempo dada por Beethoven, es: Allegro con brío.

1.- primera corchea: síncopa y anacrusa
2.- segunda corchea: por efectos de la corchea anterior, deviene tiempo fuerte
3.- tercera corchea: síncopa y anacrusa.

Las síncopas, por su naturaleza, deben ser acentuadas, pues significan la alteración de un orden, de una estructura.

Por su ubicación en el compás, las síncopas tienen, además, la función de anacrusas, lo que resultan en una caída fuerte, acentuada, en su siguiente nota.

La segunda síncopa no es sólo resultado de una inercia, sino que, asimismo, es una necesidad composicional para garantizar la continuidad y la linealidad del motivo musical, aportando una insistencia vehemente e implacable, que va siempre, como en todo el movimiento, hacia adelante: es un movimiento que tiene el futuro como meta. Es el significado de “con brío”: implica una resolución, un ímpetu para llevar las cosas adelante de manera incesante, un impulso energético que, con afán, empuja acciones, como si no se quisiera perder segundo alguno en el camino hacia su meta, hacia su futuro.

En no pocas ocasiones, me ha resultado muy doloroso el atestiguar como algunos (inclusive nombres famosos!) transforman este genial inicio de una de las obras más icónicas del repertorio sinfónico, en un tresillo, que no sólo ignora el tremendo valor del silencio inicial de corchea (8avo) sino que, peor aún, debilitan hasta la ignominia el poderío del primer compás. Aún peor: otros no tienen idea de las duraciones de los calderones (Celibidache dixit: los calderones son punto de reposo en acción!), haciéndolos durar sin relación alguna a lo inmediato anterior. Otros más, le agregan un cursilísimo diminuendo a esos calderones, con los que el brío desaparece. Ante las limitantes técnicas de la dirección, agregan algo más: un compás de silencio después del segundo calderón. Beethoven los podría demandar a todos ellos por violaciones al derecho de autor!!!!

También debe entenderse la manera de exponer este movimiento: debe ser marcado siempre en uno, es decir, cada compás mantiene en todo momento su energía característica en tanto que lo define la métrica de 2/4 en un Allegro con brío. Considero un absoluto error, prueba de no haber entendido a cabalidad la naturaleza del movimiento y una tremenda constancia de antimusicalidad, lo que algunos hacen al marcar el movimiento en agrupaciones de compases (por lo general, de cuatro en cuatro), que los marcan en figura de cruz, cuya naturaleza de tendencia decreciente, nada tiene que ver con la exigencia vital y épica del Allegro con brío beethoveniano

El reto, entonces, es: ¿cómo se debe dirigir la anacrusa correspondiente a este primer movimiento del op. 67 de Beethoven?

(C)SergioIsmaelCárdenasTamez.