viernes, 29 de noviembre de 2019

12 años en Música de Concierto de México


En junio de 2007, fui electo por unanimidad, Presidente de la promotora Música de Concierto de México, S.C., fundada por el compositor mexicano Manuel Enríquez y otros colegas que le apostaron a la promoción de nuestra música de concierto.

Entre las actividades más importantes que lleva a cabo esta promotora, está la renta de materiales de ejecución a las orquestas de México y del mundo, de las obras que engalanan nuestro catálogo. Comparto aquí información estadística que da cuenta de las obras de nuestros compositores que se rentaron en el periodo comprendido entre junio de 2007 y diciembre de 2018. Esta valiosa información de la historia de la exposición de música mexicana de concierto, fue recopilada por mis colaboradoras en la promotora, la Sra. Cristina Galván y la Srita. Eunice Rocha. Mi gratitud a ellas por esta significativa aportación a la documentación sobre la presencia de la obra de nuestros socios compositores en las salas de concierto de México y del mundo.

En septiembre, 2019, fui reelecto (por tercera ocasión consecutiva) en la posición de Presidente de la promotora, como lo informé en  http://onomatopeyadeloindecible.blogspot.com/2019/08/musica-de-concierto-de-mexico-s-c-nueva.html

Agradezco a los compositores socios de Música de Concierto de México, S.C., la confianza que me han dispensado a lo largo de estos años. De similar manera, agradezco a la Sociedad de Autores y Compositores de México, S de GC de IP, el apoyo que ha hecho posible que la sede de nuestra Sociedad Civil, esté en sus instalaciones de la Ciudad de México. Hago votos porque la música mexicana de concierto tenga una mayor presencia en las salas de concierto de nuestro país y allende las fronteras.















miércoles, 27 de noviembre de 2019

50 años como compositor


La Sociedad de Autores y Compositores de México, S de GC de IP, tuvo a bien incluirme entre los festejados en su ya tradicional ceremonia que reconoce la trayectoria de los compositores musicales de México. En mi caso, lo hizo con motivo del cincuentenario de la primera exposición pública de una obra musical de mi autoría, que tuvo lugar el 28 de junio de 1969.

Hoy, 27 de noviembre de 2019, recibí un ejemplar del Libro-Memoria de esa celebración, así como un DVD que recoge mi participación en la referida ceremonia. El enlace al video es

https://youtu.be/dzN8K_uIKhA 

Mi agradecimiento y felicitación al Ing. Gonzalo Curiel, así como a su equipo de colaboradores, que con esmero y cariño prepararon el festejo y la edición de esta memoria. La fotografía fue tomada por Jesús Morales.














martes, 26 de noviembre de 2019

¿Qué es CONSORTIUM SONORUS?




                           CURRICULUM VITAE 
                                               de 
                        CONSORTIUM SONORUS


   Consortium Sonorus* (CS) es una orquesta de cámara de ímpetu y configuración juvenil que inició actividades en los albores del año 2016, gracias a una iniciativa del compositor musical y director sinfónico mexicano, Sergio Cárdenas. Lo hizo en el seno de la Facultad de Música-UNAM, pues la mayoría de sus integrantes eran, en ese momento, estudiantes avanzados de esa institución.

   Desde el inicio de sus actividades, la organización del ensamble se planteó como un organismo de autogestión, con vocación democrática. En su aún corta historia, Consortium Sonorus no ha recibido ningún tipo de subsidio (federal, estatal o municipal) que coadyuve a la realización de sus actividades. Además, todos los integrantes, incluido su Fundador y Director Artístico, han venido llevando a cabo sus acciones en CS, ad honorem.

   Este espléndido y energético ensamble, ha desplegado sus hermosas sonoridades en más de 20 distintos recintos de la capital mexicana, algunos de ellos con emblemática tradición concertística, como lo son la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes, la Sala Nezahualcóyotl, del CCU, y el Auditorio Divino Narciso, de la Universidad del Claustro de Sor Juana. Asimismo, ha tenido exitosas presentaciones ante públicos de los estados de Querétaro, Morelos, Tlaxcala y Estado de México.

   En los más de 45 conciertos brindados al día de hoy, CS ha promovido a más de 40 jóvenes músicos mexicanos como solistas de sus conciertos, así como incluido más de 15 obras de la autoría de compositores mexicanos, cuatro de ellas en estreno mundial al resultar triunfadoras del Concurso Joaquín Gutiérrez Heras de Composición Musical, patrocinado por herederos del compositor. Del repertorio internacional, Consortium Sonorus ha abordado más de 45 obras diversas de los siglos  XVIII al XXI. Fiel a su compromiso con el desarrollo de jóvenes talentos mexicanos, Consortium Sonorus ha impulsado a jóvenes directores de orquesta: cinco (5) jóvenes han empuñado la batuta ante el ensamble conduciendo demandantes obras.
  
   En un tenor similar, Consortium Sonorus ha ampliado su campo de acción al integrar a un joven ensamble coral, como es el coro Cánticum Novum, a sus actividades concertísticas. Merece especial mención la generosa acción emprendida por Consortium Sonorus en beneficio de la damnificados del temblor del 19 de septiembre de 2017.

   Consortium Sonorus ha desempeñado una papel exitoso en la formación de públicos, lo cual ha quedado manifestado a través de la versatilidad demostrada en sus ambiciosas programaciones y a través del carácter pedagógico que manifiesta con frecuencia en sus presentaciones públicas. Notorias han sido sus presentaciones ante públicos universitarios y ante públicos asistentes a diferentes congresos de índole científica.

   Consortium Sonorus subraya entre sus actividades, la aportación profesionalizante que hace a cada uno de sus integrantes. Por ello se apreció mucho la impartición de un Curso Magistral a cargo del gran violinista mexicano Adrián Justus. En este mismo marco de acción, para CS constituyó un enorme honor la participación de la insigne pianista mexicana GUADALUPE PARRONDO, como solista del ensamble. Cada integrante de CS   asume responsabilidades específicas en el ensamble.

A punto de concluir el cuarto año de exitosas actividades musicales ininterrumpidas, CONSORTIUM SONORUS se yergue como un enjundioso ensamble juvenil mexicano de ejemplar trayectoria, de cautivadora manera de compartir su vocación musical y de un entusiasmo que le apuesta a un futuro luminoso de brillantes sonoridades en el horizonte nacional. Su misión bien podría ser como una entidad que siembra futuro musical cualitativo en la juventud mexicana con su consecuente repercusión en el público de todas las edades y estratos sociales.

                                                                                                          Ciudad de México; noviembre de 2019.

* grupo o asociación sonora o sonante.

sábado, 23 de noviembre de 2019

Mi rap para Mozart en la Sala Hermilo Novelo



El jueves 21 de noviembre, 2019, por la noche, en la Sala Hermilo Novelo, del CCOY: ¡qué manera tan magnífica de celebrar el día del músico con los muy talentosos alumnos de la insigne pianista mexicana GUADALUPE PARRONDO! La verdad, brillaron en sus distintas participaciones exponiendo obras de Shostakovich, J. Rosas, Saint-Saëns y, con enorme deferencia para conmigo, mi rap para Mozart, “The flower is a key”, sobre un poema del guanajuatense Dyma Ezban, en la versión para dos pianos y rapero realizada por Christoph Splittstoesser.
Agradezco de corazón a Álembert Vázquez y Edmundo Salazar su lograda participación pianística en esta obra de mi autoría original; asimismo, agradezco a Ángel Hernández su lograda participación como rapero: a ellos ¡mi entusiasta felicitación!
En el intermedio de la velada, se me entregó en Reconocimiento que anexo, mismo que no especifica que lo ahí manifestado tuvo lugar en el Centro Cultural Ollin Yoliztli, que por estos días festeja cuatro décadas de ininterrumpida actividad, gracias a la visionaria labor de Doña Carmen Romano Nolk, fundadora de la institución.


La velada, que llevó por título “Rapeando with Cecilia”, coincidió con la celebración de las cuatro décadas que Guadalupe Parrondo ha compartido, de manera más que generosa y, a la vez, con plena responsabilidad artística, su experiencia y conocimientos pianísticos, forjando así varias generaciones de magníficos pianistas mexicanos que enaltecen la música de México.
Así, pues, felicitaciones múltiples: por el Día del Músico; por los 40 años del CCOY; por las cuatro décadas de apasionada labor pedagógica de Guadalupe Parrondo; y por el brillante examen de música de cámara brindado en la referida velada: ¡Enhorabuena!

sábado, 16 de noviembre de 2019

"Marchita el alma", en TAIWÁN




“MARCHITA EL ALMA”, EN TAIWÁN

El pasado mes de octubre, 2019, el joven pianista guanajuatense (*Salvatierra), Hernán Martínez Mercado, se presentó con éxito ante públicos de la República China de Taiwán, exponiendo un programa configurado de manera íntegra con obras de autoría mexicana, como se puede apreciar en la foto del programa de mano que se anexa . Martínez Mercado tuvo a bien incluir mi fantasía para piano solo sobre la melodía “Marchita el alma”, de la autoría del también guanajuatense  (*Silao) Antonio Zúñiga (melodía que ha sido atribuida a Manuel M. Ponce). De fuerte carga expresionista, mi fantasía sobre “Marchita el alma” teje sonoridades de tremenda complejidad cromática, demandando del pianista el hacer suyo ese dramático marchitar del alma abatida que se desgrana errando, sin esperanza de alcanzar al ser amado.

Martínez Mercado me ha comentado que la pieza fue muy bien recibida por los públicos taiwaneses que la escucharon en las ciudades de Taipei (23 de octubre), Kaohsiung (27 de octubre), Hsinchu (29 de octubre) e Yilan (30 de octubre); algunos oyentes solicitaron copia de la partitura de la pieza.

Mi agradecimiento a Martínez Mercado por la deferencia de incluir esta obra de mi autoría en esos conciertos dedicados al repertorio pianístico mexicano de concierto, así como mi felicitación por salir airoso de esa loable encomienda. ¡Enhorabuena!



Comparto aquí la partitura de esta fantasía. Quien se interese en exponerla en público, la puede descargar de aquí mismo. Agradecería que se me informara sobre la(s) exposición(es) pública(s) que se logre(n).




La pianista mexicana GUADALUPE PARRONDO, a quien está dedicada la pieza, hizo una grabación que se puede escuchar en

                       https://www.youtube.com/watch?v=FI60XYqtY4U&t=78s

martes, 12 de noviembre de 2019

Con Boulez en Princeton (USA)


En 1972, cuando estudiaba en Princeton, NJ (USA) en el magnífico WESTMINSTER CHOIR COLLEGE, tuve la oportunidad de conversar brevemente con PIERRE BOULEZ, a la sazón Director Musical y Principal de la Filarmónica de New York, en el intermedio del ensayo que tuvimos en la Bristol Chapel, de nuestro College, en preparación para los conciertos en New York con su orquesta. BOULEZ había venido a nuestro Campus en Princeton para ensayar el programa que cantaríamos quienes integrábamos el Westminster Symphonic Choir, programa que incluyó la "Cantata Profana", de BÉLA BARTOK, y el "Te Deum", de HÉCTOR BERLIOZ. Le pregunté si conocía la música de México, a lo que contestó que sólo sabía de Carlos Chávez.

Comparto aquí unas fotos de esa ocasión, que fueron tomadas por el colega Edwin R. Taylor, a quien agradezco el haberlas proporcionado.




domingo, 10 de noviembre de 2019

"¡Compón bonito!"




¿Qué es eso de “¡Compón bonito!” ?
por Sergio Cárdenas*

                                                                                            Al Mtro. Francisco Viesca, con gratitud.

   Debe de haber sido hacia 1976 o quizá 1977, cuando tuve la oportunidad de estrenar una obra musical de mi autoría en Salzburgo. Ha sido la única que se ha expuesto ahí.  La sede de Salzburgo de la Radio Austriaca (ORF-Salzburg), organizó en su Estudio un concierto con estudiantes de composición de la entonces Escuela Superior de Música “Mozarteum”. Mi maestro, Gerhard Wimberger, me recomendó y autorizó a que participara con mi “Salmo 23”, ciclo de cuatro canciones religiosas sobre el conocido texto bíblico, que yo había compuesto en 1975 para soprano y piano durante mis estudios con él.

   El ciclo constituyó casi la única vez que recurrí a la técnica dodecafónica de composición, no en el sentido estricto o expresionista de Schönberg, sino un poco más lírico o libre como en Alban Berg. El ciclo, en su dodecafonismo, incluye secciones aleatorias y semialeatorias, así como algunos guiños al recitativo y al dramatismo vocal.

   No me preocupé, entonces, de conservar un registro fonomecánico del ciclo, pero recuerdo que fue bien recibido, aunque hoy confieso que ya olvidé los nombres de quienes lo expusieron y ni siquiera conservo un ejemplar del programa de mano.

   Pero de manera especial recuerdo vividamente que al término del concierto, mi maestro Wimberger, tras felicitarme, me comentó: “ Siga usted por ese camino: sólo componer bonito.” Vaya que si bien me halagó el comentario, también me sorprendió y me llevó a reflexionar sobre el concepto de lo "bonito” en música. El ciclo, por fuerza de esa autoimposición del dodecafonismo, está lleno de disonancias, incluso en algunos pasajes de “clusters”, que son esas sonoridades abigarradas que resultan de prácticamente “empalmar” sonidos que entre ellos están muy cercanos uno del otro en el sistema temperado, como por ejemplo, hacer sonar de manera simultánea los sonidos do-natural, do-sostenido, re-natural, re-sostenido, mi-natural y fa-natural, como si fuera un racimo de uvas, todas pegaditas unas a otras.

   Para muchos oídos, todos esos “efectos sonoros”, asustan, pues no sólo profundizan en el cuestionamiento sonoro-sensorial, sino que también requieren un mayor entrenamiento auditivo o confrontación más frecuente con músicas de esta naturaleza.

   En 1982, durante una gira concertística como director por la entonces URSS, realicé una orquestación de ese mismo ciclo, versión que fue estrenada por la excelente soprano Margarita Pruneda y la Orquesta Sinfónica Nacional de México, en el Palacio de Bellas Artes en el otoño de ese mismo año.  Esta es la versión que grabé con la maravillosa soprano mexicana Rosario Andrade y la Filarmónica de Querétaro, a principios de 1993. Cuando el CD se publicó, llevé varios ejemplares a Alemania, con fines promocionales.

   Un gran amigo mío, que con cierta frecuencia me promocionaba en Alemania, me pidió que le dejara varios ejemplares de mi curriculum vitae  (CV) y alguna grabación que yo dirigiera para anexarla al CV cuando él me promoviera con alguien. Procedí a dejarle varios ejemplares del CD en el que se incluía mi SALMO 23. Una vez que lo oyó, me preguntó: “¿no tienes alguna grabación de otra obra?”. Con cierta extrañeza le respondí: “¿Porqué?”  Entonces me dijo: “¡Los vas a asustar con esa obra tuya!”  Me quedé perplejo y no dije nada más: comprendí que para mi amigo, el SALMO 23 no era una obra "bonita”.

   En su pubertad tardía y en su temprana adolescencia, Mozart recibía “regaños” de su papá porque componía de manera demasiado audaz: la gente se quejaba de sus “atrevimientos” musicales, que no percibía agradables, es decir, “bonitos”, a sus oídos. Ya en 1780, Leopold Mozart advertía a su hijo Wolfgang (quien se encontraba en París buscando trabajo): "Te aconsejo, cuando trabajes, no pensar sólo y exclusivamente en un público musical, sino también en uno no musical; ya sabes que por diez entendidos auténticos hay diez profanos...no olvidar entonces lo llamado popular, que hace cosquillas también a los oídos grandes" (Carta del 11 de diciembre, enviada desde Salzburgo).

   El 25 de diciembre del mismo año, Leopold volvió al ataque: " Procura tener de buen humor a toda la orquesta, adularla y volverla bien dispuesta hacia ti con grandes elogios; porque sé bien cómo compones tú..." (1)


   Mozart no hizo caso a los consejos de su padre: se mantuvo fiel a su honestidad creativa, es decir, fiel a sí mismo. ¿Podemos hoy imaginar siquiera que la música de Mozart es agresiva, o algo similar, a nuestros oídos? ¿Qué es lo que oía su padre Leopold en ella? 

   En 2003, invitado por el entonces Festival Internacional Tamaulipas, dirigí una gira de la magnífica Filarmónica de Cámara de Polonia por ese Estado. El programa incluyó el estreno mundial de mi pieza COLUMPIOS, música para clarinete en Sibemol y orquesta de cuerdas, dedicada a Jörg Baumann, basada sobre un hermoso poema de Rilke. En el concierto que ofrecimos en Reynosa, sucedió lo siguiente:

   Al término del concierto, pasó a saludarme un matrimonio con su hijo. Yo no los conocía. Me hicieron comentarios generales elogiosos sobre el concierto, pero sobre COLUMPIOS, el señor me comentó: “en la primera parte de la pieza, conforme fue desarrollándose, le comenté a mi esposa: “Van ganando los malos”. Poco después de la mitad,  la pieza desemboca en una cadencia del clarinete que, a su vez, culmina en una cita de unos cuantos compases, que siempre me han cautivado, del sublime Concierto para Clarinete y Orquesta, de Mozart. “Cuando eso sucedió”, me dijo el señor, “le dije a mi esposa: “Noooo, ¡¡¡ganaron los buenos!!! Pero luego regresó usted a pasajes como los del inicio y, resignado, le comenté a mi esposa: “pues nada, ganaron los malos”.

   Sobre esta pieza, el Mtro. Armando Plancarte escribió: “Como sucede con todo arte moderno, la obra de Cárdenas retoma elementos clásicos pero a la vez los renueva, los increpa, los transforma, los revalora, los reconduce, los reforma. El compositor conoce muy bien su oficio. Sus años de experiencia al frente de orquestas de primer nivel, en diferentes latitudes, y longitudes, así como su probada sensibilidad e inteligencia auguran buenos resultados. Su música es natural, fluye por si sola, provista de su propio motor interior. “

   Cuando en el año 2003 los excelentes 12 VIOLONCHELISTAS DE LA FILARMÓNICA DE BERLÍN celebraron su 30º Aniversario, Shirley Apthorp escribió en la edición correspondiente al mes de marzo de ese año de la prestigiada revista británica THE STRAD, “que si los violonchelistas berlineses habían incluido en su (entonces) más reciente CD, ‘ROUND MIDNIGHT (publicado por EMIClassics) una obra tan subversiva como el rap para Mozart (The flower is a key), entonces se podría esperar aún mucho de esos violonchelistas.”  Celebraba la señorita Apthorp no que mi pieza fuera "bonita", sino que fuera “subversiva”.

   En fechas recientes, muchos mexicanos y, de seguro, gentes de otros países, lamentaron la muerte de su ídolo José José. Conversando al respecto con un ser muy querido,  admirador profundo de José José, me contó la siguiente historia:

   “En 1977, el nicaragüense Adán Torres mostró al cantante José José  su canción “Almohada”. El cantante le prometió registrarla en México a nombre de Torres; la presentó en el Festival OTTI de 1978, donde quedó en cuarto lugar. Más tarde, la canción fue grabada en Londres y la disquera, seguro que por instrucciones del cantante, dio el crédito correspondiente al autor de la canción en la contraportada del LP.  Ante los embates de la guerra en Nicaragua, Torres emigró a los USA, donde radicaba su hermano. Consiguió trabajo en una lechera de California; ahí se encargaba de limpiar los tanques de 50,000 litros. Para entonces, la disquera asumía que Torres había fallecido. Sin embargo, Torres llamó a la disquera y esta envió a un propio a que le entregara el primer cheque de sus regalías: US$10,000.- Y así siguieron después otros pagos de regalías.”

   Luego, mi amigo querido remató diciendo: “¿porqué no compones algo bonito,  ¡te podrías volver millonario, como Adán Torres!”

   “¡’chale!”, me dije; “entonces ¿qué he estado haciendo en todos estos 50 años como compositor musical?” Debo decir que esta persona conoce casi todas mis composiciones musicales…¡quizá por ello me dijo eso!!!!

   Entonces ¿cómo debe ser la música: siempre “bonita”? Y eso, ¿de acuerdo con cuáles marcos de referencia? Y, en efecto, ¿ debe ser así  la música: “siempre bonita”?  Bruckner comentó que si la gente sólo buscaba que le acariciaran el oído, recomendaba escuchar la música de Brahms. Pero si la gente buscaba ser cautivada, atrapada, arrobada por la música, entonces deberían escuchar su música.

   La “Gran Fuga” (op. 133), que es un movimiento para cuarteto de cuerdas que Beethoven  compuso entre 1825 y 1826, ha sido una de las obras más polémicas del genio de Bonn, por su “violencia y sus muchas disonancias, por su estruendo”. La intención original era que fuese el último movimiento del Cuarteto op. 130, pero el editor se opuso a ello por su tremenda complejidad y dificultad técnica. Se le considera, aún hoy, como una de las obras más “inaccesibles” de Beethoven. Se dice que cuando se estrenó, el público abandonó la sala, dejando solos a Beethoven y al cuarteto de ejecutantes. Un crítico de entonces se refirió a esta monumental obra así: “Es incomprensible como el chino”. 

¿Qué espera uno, pues, de la música?

©SergioIsmaelCárdenasTamez, Ciudad de México, 30 de octubre de 2019.


(1) HILDESHEIMER, Wolfgang: MOZART. Javier Vergara Editor, Buenos Aires, 1982. Pág. 75

*compositor musical, director sinfónico, Director Artístico de Consortium Sonorus,
  orquesta de cámara.

  Presidente de Música de Concierto de México, S. C.