PARA QUE DIOS NO SE TROPIECE...
Calavera de la autoría de PÍA
Allá por donde andan los coyotes,
la muerta rodante,
muy arrogante ella,
sin vestigios de madre alguna,
a gritos y manotazos
quiere que le teman ...
¿cuál es su dolor?
Se rodea de carroñeros
que a su paso
bajan la cabeza
y a unísono repiten:
lo que usted mande “maistra”*...
¿quién en semejante abandono la dejó?
A sus amos sirve
con esa sumisión del mediocre
que sólo busca
con paja su vacío llenar ...
¿quién la humilló hasta doblarla?
Un día, en la FaM del silencio,
el sol brilló,
Cárdenas a todos despertó
de ese sueño sin remedio,
de esa muerte prematura por sistema,
¡¡¡ y hasta Berlín se los llevó !!!
Dúos, tríos, cuartetos,
Sinfonías, Cantatas, Requiems,
alientos, cuerdas y percusiones
su luz seguían,
con insólita disciplina,
su espíritu cantaba …
Luz verdadera que a la “maistra” asustó,
entre telarañas y tinieblas,
a sus esbirros llamó:
“inventen calumnias,
una AIA** para Cárdenas,
escondan los instrumentos
asusten a los chavos“
con furia gritó !!!
y por sus barbas
a Cárdenas de la FaM rescindió.
Pensando que podría,
con la luz ajena vivir,
pensaba que era fácil,
hacer que el sol dejara de brillar,
que la primavera no volviera más,
que su gélido aliento
le permitiría cantar.
Todos sabemos que Cárdenas
camina de frente,
con honradez y trabajo
mueve las notas,
para que Dios no se tropiece.
Todos sabemos que su luz
por siempre brillará
y la muerte nunca podrá
con sus Raps acabar.
Todos sabemos que allá
por los montes altos
acerca su oído al tronco de un árbol
y hace columpios con las nubes.
La muerte rodante,
vacía se quedará;
en un hoyo profundo,
todos lo saben,
por siempre estará.
PÍA
Ciudad de México; 2 de noviembre 2020
* "maistra": María Teresa Gabriela Frenk Mora
**AIA: Acta de Investigación Administrativa
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