jueves, 26 de febrero de 2015
Mi cartilla en Viena (La digna metáfora, no. 2)
En la página 27 del número 2, correspondiente a la edición del 16 de febrero de 2015, de la revista cultural LA DIGNA METÁFORA, se publica el artículo de mi autoría "Mi cartilla en Viena", que dediqué con agradecimiento al querido amigo FERNANDO ÁVILA NAVARRO.
lunes, 23 de febrero de 2015
Segundo Festival de Primavera Oaxaca '83, de la ORQUESTA SINFÓNICA NACIONAL de MÉXICO.
Imborrables recuerdos de lo brindado entre el 26 de marzo y el 3 de abril de 1983, en el marco del Segundo Festival de Primavera, con la ORQUESTA SINFÓNICA NACIONAL de MÉXICO, en la ciudad de Oaxaca, Oax (México) y otras ciudades y comunidades aledañas.
El concierto inaugural, en que de manera simultánea celebramos el 50º Aniversario de la brillante carrera de HENRYK SZERYNG como violinista, contamos con la presencia del C. Miguel de la Madrid, Presidente de México. El programa de ofrecimos: simplemente de lujo, honrando así la enorme musicalidad de los oaxaqueños con la imponente obra cumbre de la literatura sinfónica del Siglo XX, "La Consagración de la Primavera", de I. Stravinsky.
Fue, en suma, un festival lleno de proezas musicales, con todos los integrantes de la OSN dando lo mejor de sí, lo cual fue reconocido y aplaudido con creces por el público de Oaxaca.
domingo, 22 de febrero de 2015
En abril, 2002, revista CONTENIDO (Ciudad de México).
Entrevista realizada por FABIOLA SÁNCHEZ PALACIOS, para la revista CONTENIDO (Ciudad de México). se publicó en la edición de abril, 2002, de esa revista. Fotos de: Aristeo Becerra.
sábado, 21 de febrero de 2015
ANTONIO PORCHIA : Voces
ANTONIO PORCHIA : Voces
(Stimmen, für Roger Caillois)
· La verdad tiene pocos
amigos. Y los pocos amigos que tiene son suicidas.
· El ser humano no va a
ningún lado. Todo viene a él, como el amanecer.
· Quien me tiene agarrado
de un hilo, no es fuerte. Fuerte es el hilo.
· Nunca me abandona una
cierta ingenuidad. Es la que me protege.
· Mi pobreza no está
completa: hago falta yo.
· Si no alzas los ojos,
creerás que eres el punto más alto.
· No logro ser, con
nadie, como alguien más. Entonces me quedo tal cual soy: como nadie.
· Lo malo de ser
incrédulo es creer un poco.
· Yo sé que nada tienes.
Por eso te exijo todo, para que tengas algo.
· Vengo del morir, no del
nacer. Del nacer es de donde he partido.
· Dios mío, casi nunca he
creido en ti, pero siempre te he amado.
· Si fuera como una roca
y no como una nube, mi pensamiento, que es como el viento, me abandonaría.
· Quien todo lo perdona
ha tenido que perdonarse todo a sí mismo.
· Uno vive con la
esperanza de volverse recuerdo.
· Soy de barro, pero casi
nunca lo he tocado.
· Creo que el mal del
alma es el alma misma. Un alma curada de su mal, muere.
· El ser humano habla de
todo y sobre todo, como si el conocimiento estuviera en él.
· Una cosa sana no
respira.
· Mucho de aquello que
dejé de hacer en mí mismo, se sigue haciendo en mí, por sí mismo.
· Sí, se equivocan porque
no saben. Y si supieran...Nada. Ni siquiera se equivocarían.
· Todo es obra de los
declives, como los ríos.
· El cosmos no constituye
un orden unificado. Le falta la entrega del ser humano.
· Yo creo que nos
habitamos mutuamente sin morarnos, pues morando uno en el otro no nos podríamos
habitar.
· Durmiendo sueno lo que
sueno despierto. Mi sonar no termina nunca.
· Dirígete a las alturas,
en las alturas.
· A veces me siento como
en el infierno y no me quejo. No sabría de qué quejarme.
· Si no me contento con
nada es porque me contento con todo.
· Mis ojos, que fueron
puentes, son abismos.
· El ser humano, cuando
sólo es lo que parece ser, es casi nada.
· Sí, así como entro en
todas las cosas, así abandono todo.
· Podrás medir la
distancia que te separa de ellos cuando entres en contacto con ellos.
· ?Es eso que te digo lo
que te digo, o es lo que me digo a mí mismo?
· Quise estar en algo
para no estar en todo.
· Cuando estoy cansado de
tanta superficialidad, lo estoy de tal manera que necesito un abismo para
descansar.
· Nunca es caro lo que
uno paga con la vida.
· Quien no llena su mundo
de fantasmas, permanece solo.
· A veces pienso que la
necesidad es tan grande, que tengo miedo de necesitarla.
· Tú crees que me matas.
Yo creo que te suicidas.
· El quejarme de todo y
de todos mientras crecía, se volvió un lamento mío sobre mí mismo. Y ese
lamento sigue creciendo.
· Porque
eres lo mejor sobre el planeta, piensas que eres lo mejor para el mundo. !Cuanto nos mienten
nuestros puntos de vista!
· Lo
lejano, lo muy lejano, lo distante, lo enconmtré sólo en mi sangre.
· Y
si lograras ser un ser humano, ?qué más podrías lograr?
· Apenas
habla quien dice la verdad.
· Algo,
antes de ser concluido, es sólo ruido. Una vez concluido, es silencio.
· Los no-vacíos, puntos
de apoyo de los vacíos, no tienen puntos de apoyo y vagabundean...en los
vacíos.
· Estábamos sólo el mar y
yo. Pero el mar estaba solo y yo me sentía solitario. Uno de los dos faltaba.
· Mi pesadez viene de los
abismos.
· La tierra tiene lo que
levantas de ella. No más.
· Sólo la herida habla
con su propia palabra.
· Lo indomable del ser
humano no es su maldad, sino su bondad.
· Las quimeras vienen
solas y se van acompanadas.
· Si alguien dispara una
flecha para herirme, alcanza una herida consumada y no me puede herir.
· Hay dolores que perdieron
la memoria y no se acuerdan porqué son dolores.
· El ser humano que no se
está quejando, casi ni existe.
· Dirán que te encuentras
en el camino equivocado cuando andes tu propio camino.
· Tenemos un mundo para
cada quien, pero no tenemos un mundo para todos.
· La maldad me conmueve
con debilidad; con fuerza me calma.
· Continúo navegando
mares ajenos, hasta que me vuelva náufrago en mi propio mar.
· Uno pierde el
entendimiento cuando piensa razonablemente.
· Quien asciende escalón
por escalón, se encuentra siempre a la altura del escalón.
Traducción de la versión alemana
de Tobias Burghart, de © Sergio Ismael Cárdenas Tamez, Ansbach, el 2 de febrero
de 2002.
Antonio Porchia (1886,
Calabria, Italia; - 1968, Buenos Aires, Argentina). Poeta, estibador, ayudante
de impresor.
La música como lengua materna
-->
*Profesor Titular de Carrera en la Facultad de Música-UNAM.
La música como
lengua materna
por Sergio CÁRDENAS*
El 21 de
febrero de 2000, la ONU celebró por primera vez el Día Internacional de la
Lengua Materna (http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_de_la_Lengua_Materna
) .
Con frecuencia he leído y oído que la verdadera patria de
uno, es la lengua materna. Mis múltiples y variados periplos por el mundo me
han permitido, cada vez más, constatar la dimensión de esa aseveración, al
menos en mi experiencia personal. Hay cosas, conceptos que sólo puedo expresar
en los giros lingüísticos de mi lengua materna, con toda su riqueza expresiva,
con toda su “musicalidad”. Cuando
en ocasiones he tratado de traducir alguno de estos giros a mis amistades de
otras latitudes, la contundencia del giro en cuestión se queda corta en la otra
lengua, no sólo porque la traducción, si bien merodea en el sentido y
significado de lo traducido, ya ubica al giro en otra dimensión cadencial y con
efectos audibles muy distintos, sino porque la “musicalidad” original del giro
lingüístico, desaparece.
No tuve la fortuna de aprender en mi niñez otro idioma. Eso
se nota de inmediato cuando me expreso en un idioma que no es mi idioma
materno. Puede ser que la gramática, sintaxis, declinaciones e inflexiones de
los verbos estén correctas: de cualquier manera, se seguirá notando lo que se
conoce como el “acento”, es decir, esa aparente sonoridad que lo devela a uno
como forastero en otro idioma. Conozco, sin embargo, muchos casos de personas
afortunadas que crecieron desde su nacimiento con una o más lenguas maternas de
manera simultánea: ¡con qué gran patrimonio cuentan!
En ciertas ocasiones he comentado sobre la importancia de
abordar el fenómeno de la exposición musical de tal manera que demostremos que
la música es nuestra lengua materna. Hace varias décadas asistí al Palacio de
Bellas Artes de la Ciudad de México,
a un concierto de la Sinfónica Nacional. El programa era conducido por
un estadunidense; se inició con “Sones de Mariachi”, de Blas Galindo. En la
fila adelante de la mía, estaba sentado el compositor y músico Manuel Enríquez,
a quien yo por aquellos años no conocía de manera personal. Enríquez, con toda
seguridad, había tenido ocasión de ejecutar la pieza referida un sinnúmero de
ocasiones, pues durante más de dos décadas había ocupado la posición de
Principal de Violines Segundos de esa orquesta. Cuando acabó la exposición de
“Sones…”, oí decir a Enríquez, palabras más o menos: “Eso pasa cuando dejan que
alguien dirija algo que le es ajeno”.
Dijéramos que el ocupante del podio, había dirigido esta popular pieza
del repertorio sinfónico mexicano, ¡en inglés!, es decir, en su propio idioma
materno y no en el idioma materno de la obra en cuestión.
Resulta muy difícil, ciertamente, entender o aprehender la
justa dimensión de esa exigencia que la música nos impone: que la hagamos, que
la toquemos con la naturalidad, espontaneidad, precisión y contundencia con la
que nos expresamos en nuestra lengua materna. Se trata de un reto mayúsculo,
pues es menester que nos adentremos de tal manera en cada obra, que ese proceso
nos permita dejar manos libres a la obra para que, a su vez, se adentre en
nosotros de forma plena y, así, pueda emerger desde nuestra interioridad como
una expresión propia, natural y no como si la estuviéramos traduciendo a partir
de su notación musical.
Así como en el escenario un actor que encarna a Hamlet debe
haber recorrido todo ese trayecto que ha de permitirle expresarse como Hamlet
mismo y no como su traductor, así el exponente musical debe esforzarse no en la
infame y manida inercia de la interpretación musical (a los traductores también
se les denomina intérpretes), que de manera tan irresponsable promueven la
mayoría de los docentes musicales, sino esforzarse en no imponerle a la obra
sus limitaciones o virtudes, como tampoco sus estados sicológicos no resueltos,
sino disponerse a dejar que la obra se manifieste a sí misma, con toda su
naturalidad, espontaneidad, precisión y contundencia.
Otra de las malhadadas costumbres que tienen no pocos
docentes musicales, es esa de recomendar a sus pupilos que escuchen grabaciones
de la obra a estudiar. Peor aún, varias personas que se venden como docentes de
la dirección orquestal, recurren en su pobreza musical, en su irresponsabilidad
y sucumbiendo ante su inocultable flojera, al uso de grabaciones para que sus
alumnos (¡mis condolencias a todos ellos!) batuteen las obras que dicen
estudiar siguiendo lo que la grabación usada les impone. Las grabaciones son
también traducciones de algo, algunas seguramente mejor hechas que otras,
algunas con mejores aparatos de grabación, algunas con ejecutantes de alto
nivel técnico. Con todo eso, no dejan de ser traducciones y, en todo caso, documentos
de algún momento, tal cual sucede con las fotografías.
Con frecuencia he comentado que varios de los músicos
famosos que abordan obras del repertorio mexicano, las hacen sonar como obras
que no son parte de la lengua materna de esos famosos: suenan extrañas, no
hilvanadas en sí mismas, con desproporciones de expresividad en sus distintos
segmentos, pues desconocen la cadencia interior de la lengua materna en la que
se manifiesta esa música. Sin duda alguna que algo similar sucede cuando
músicos de fama injustificada, abordan obras de los clásicos del canon de la
música de concierto. Incluso cuando, por ejemplo, mariachis coreanos, suecos o
de otras latitudes, abordan las piezas del canon mexicano de la música de
mariachi: sí, tocan todas las notas, algunos de ellos incluso más afinados,
pero nomás “no suenan”.
Tengo para mí que este “no suena” no se da porque ellos no
sean mexicanos, sino porque ha faltado recorrer exitosamente el camino que
permite que esa música sea aprehendida como aprehendemos nuestra lengua
materna, de tal manera que la podamos tocar con la misma contundencia y fluidez
como la hablamos.
Celebrar como músicos el Día Internacional de la Lengua
Materna implica, desde mi perspectiva, responder al imperativo categórico que
nos presenta la música: no expresarla como una lengua que nos es
extranjera, sino como una lengua que radica en nuestro corazón y se manifiesta
a plenitud con naturalidad, espontaneidad, precisión y contundencia.
*Profesor Titular de Carrera en la Facultad de Música-UNAM.
©Sergio Ismael
Cárdenas Tamez, Ciudad de México; el 21 de febrero de 2015.
jueves, 19 de febrero de 2015
Sergio Cárdenas, una década dedicado a la docencia en la UNAM
El periódico AVENIDA DIGITAL 3,0, de Guanajuato (México), publicó en su edición del 18 de febrero, 2015, la siguiente nota firmada por la periodista NANCY RODRÍGUEZ:
http://www.avenidadigital30.com/sergio-cardenas-una-decada-dedicado-a-la-docencia-en-la-unam/
A propósito de este aniverdario, Sergio Caárdenas afirma que “Han sido 10 años de continuo aprendizaje y crecimiento, compartiendo mi experiencia de ya más de cuatro décadas en el ejercicio público de la música como compositor, director y promotor cultural”.
Reiteró su agradecimiento a la comunidad de la FaM-UNAM por esta magnífica oportunidad que se le ha brindado por los colegas profesores, por el estudiantado, por el personal administrativo y técnico. Y muy en especial, a quienes han sido integrantes de la ORQUESTA SINFÓNICA, cuya participación pública alcanzó una primera cima de nivel internacional el 26 de julio de 2013, en el concierto inaugural del festival internacional de orquesta sinfónicas juveniles YOUNG EURO CLASSIC, en la Konzerthaus de la capital alemana.
De similar manera, reiteró su agradecimiento a quienes han participado en su cátedra de música de cámara, con tantos bellos momentos de escrutinio técnico y emocional de páginas eminentes de ese repertorio.
http://www.avenidadigital30.com/sergio-cardenas-una-decada-dedicado-a-la-docencia-en-la-unam/
Sergio Cárdenas, una década dedicado a la docencia en la UNAM
By Nancy Rodríguez on febrero 18, 2015
El sábado 7 de febrero, 2015, el reconocido Director de Orquesta mexicano Sergio Cárdenas celebró su primera década como catedrático en la FACULTAD DE MÚSICA (antes: Escuela Nacional) de la UNAM.A propósito de este aniverdario, Sergio Caárdenas afirma que “Han sido 10 años de continuo aprendizaje y crecimiento, compartiendo mi experiencia de ya más de cuatro décadas en el ejercicio público de la música como compositor, director y promotor cultural”.
Reiteró su agradecimiento a la comunidad de la FaM-UNAM por esta magnífica oportunidad que se le ha brindado por los colegas profesores, por el estudiantado, por el personal administrativo y técnico. Y muy en especial, a quienes han sido integrantes de la ORQUESTA SINFÓNICA, cuya participación pública alcanzó una primera cima de nivel internacional el 26 de julio de 2013, en el concierto inaugural del festival internacional de orquesta sinfónicas juveniles YOUNG EURO CLASSIC, en la Konzerthaus de la capital alemana.
De similar manera, reiteró su agradecimiento a quienes han participado en su cátedra de música de cámara, con tantos bellos momentos de escrutinio técnico y emocional de páginas eminentes de ese repertorio.
HUÍZAR en suplemento CRÍTICA (Zacatecas)
1.- ¿Existe información escrita suficiente sobre Candelario
Huízar en México?
Se ha escrito poco sobre este importante compositor musical
mexicano. Sé que hay una propuesta de hacer una investigación musicológica
sobre una o varias de sus obras en el departamento de posgrado de la Facultad
de Música-UNAM, mas desconozco el grado de avance que tenga.
2.- ¿Cuál considera usted qué es el papel musical que dentro del
nacionalismo mexicano desempeñó en su momento el maestro Huízar?
Huízar tiene en su pubertad y juventud temprana, una iniciación
musical muy empírica, centrada en la ejecución instrumental en bandas
zacatecanas. Ingresa al Conservatorio Nacional de Música (CNM) en la Ciudad de México ya como
hombre maduro. Es ahí donde su formación académica adquiere rigor y sistema.
Debe de haber sido una formación musical a profundidad, en especial en los
aspectos de la composición musical, pues su obra sinfónica denota un
conocimiento a fondo del aparato orquestal. No necesitó viajar a Europa para
empaparse de esos “secretos”: aquí los aprendió y dominó todos. Ello sin
abandonar, jamás, su convicción de creador mexicano, que en su producción
orquestal, alcanzó su cumbre con las sinfonías 2 (Oxpaniztli), 3 y 4 (Cora). En especial esta última, que
es una verdadera obra maestra que, dicho sea de paso, lleva a su máximo nivel
el enaltecimiento de lo que se ha dado en llamar indigenismo. Para esa obra
paradigmática del sinfonismo mexicano, Huízar recurrió a melodías que fueron rescatadas por
investigadores del INBA en las regiones coras de México; de ahí su nombre.
En el contexto de su nacionalismo, Huízar consolidó una
consumada técnica de orquestación mexicana al desarrollar la capacidad de hacer
sonar un aparato orquestal conformado casi en su totalidad por instrumentos
europeos, como si fuera conformado por instrumentos autóctonos. De ello dan
cuenta las dos sinfonías referidas.
Su labor pedagógica en el CNM le dio oportunidad de compartir
estos “hallazgos” con sus alumnos, entre los que destacan Moncayo y Galindo.
3.- ¿Cómo es desde el punto de vista de ese nacionalismo, el
estilo indigenista de su música, exista tal indigenismo musical en Huízar o hay
una mezcla de muchas otras tendencias musicales?
Las sinfonías 1 y 3 no consignan la tendencia o la ruta indigenista.
Considero que Huízar no se asumió de manera específica como un compositor
indigenista, sino como un compositor mexicano en el sentido más puro y amplio
del concepto, es decir, sin hacerse dependiente de folklorismos. Cuando recurre
a esas manifestaciones, lo hace como una respuesta composicional a lo que la
pieza misma va exigiendo. Así, encontramos en sus magníficos poemas sinfónicos
referencias a tradiciones folklóricas e incluso pueblerinas que, por lo demás,
reflejan el espíritu puro que le caracterizó. Los poemas “Pueblerinas”, “Imágenes”, “Surco”, contienen una
enorme carga de auténtico sabor popular, muy ligado en su espíritu a la tierra
que le vio nacer, sin hacer en momento alguno concesiones estéticas: en ellos,
Huízar mantiene un altísimo nivel composicional, nivel que en su complejidad y
dificultad, nunca pierde ese sabor.
Las sinfonías 1 y 3, por otra parte, contienen expresiones
universales que manifiestan dominio de la forma y de la orquestación, elementos
en los que se manifiesta como un maestro consumado, en especial en la
orquestación, es decir, en esa manera sabia y sensible de manifestar en sonido
la esencia de un pasaje musical.
La sinfonía 3, que con la 4 son quizá mis dos sinfonías preferidas del corpus sinfónico mexicano,
es una de las obras más complejas y difíciles de cuanto se ha compuesto en
México. Quizá por eso se expone en público tan pocas veces ( la más reciente
debe de haber tenido lugar ya hace más de ¡dos décadas!). Esto es una verdadera
tragedia, más aún en estos días en los que le imponen a nuestros públicos y
orquestas danzones de todo tipo como lo más excelso de la creación orquestal en
México. Aclaro que esto, desde luego, no lo escribo en detrimento de mi colega
Arturo Márquez, pues no es su “culpa”, sino que es reflejo de la puerilidad
intelectual, de la superficialidad e irresponsabilidad de directores y
programadores de conciertos orquestales.
¡Cuánto más rica sería nuestra apreciación del legado sonoro que
da fe a cabalidad del espíritu mexicano si la obra sinfónica de Huízar tuviera
una presencia frecuente en los conciertos de las orquestas mexicanas!
4.- Hay algunas investigaciones y comentarios del maestro
escritas por músicos como Revueltas o Galindo en su momento, publicados en
diversas revistas en las primeras décadas del siglo XX, ¿no hay investigaciones
actuales sobre su obra y persona?
Hay un comentario no sólo desafortunado, sino de similar manera
ignorante y lamentable, de la sra. Yolanda Moreno Rivas, quien en su libro
“Rastros del nacionalismo en la música mexicana” se expresa de manera
peyorativa de este grandísimo compositor mexicano: nada entendió ella de la
dimensión de lo creado y legado por este jerezano.
De fecha reciente, no conozco comentario o investigación alguna.
5.- Platíquenos, si pudiera, cómo es desde el punto de vista
técnico su obra musical, me refiero a estilo, armonía, melodía.
La respuesta a esta petición merecería uno o varios libros, tan
vasta es la aportación huizariana. Me referiré a dos ejemplos:
El segundo movimiento de la Sinfonía 4 (Cora), es un maravilloso
y enjundioso Scherzo, como ningún otro compositor mexicano lo ha logrado, en el que la chispa,
la vivacidad, lo saltarín o
retozante inherente a esa forma musical, están presentes con magistral trato de
lo melódico, lo rítmico y lo tímbrico. La exuberancia de este grandioso
movimiento es irresistible, perfectamente balanceada, oíble y arrebatadora.
El siguiente movimiento, es una emotiva plegaria que logra, con
el uso de sólo un instrumento (corno inglés), cautivarnos y trasladarnos a
dimensiones cósmicas: esa melodía parece sonar desde lo hondo del corazón en
las vastedades de la Sierra Madre Occidental: se trata de todo un acertado
golpe creativo de don Candelario, golpe que refleja su fina sensibilidad y su
enorme humildad.
6.- Usted conoce muchas anécdotas sobre la bonhomía de ese
autor, platíquenos algunas; recuerdo que usted me comentó cómo hizo algunas
recomendaciones a Pablo Moncayo sobre su Huapango.
Lamento mucho no haber conocido en persona a don Candelario.
Cuantos lo conocieron refirieron siempre su sencillez, su calidez, su
generosidad. Alguna vez su viuda, doña Consuelo Luna, me mostró unos oficios
que envió a Chávez, a la sazón director del INBA, solicitando le aumentaran su
sueldo como bibliotecario de la Sinfónica Nacional (en donde también tocaba el
corno francés), para que en lugar de ganar dos pesos, le subiera a ¡2.50 pesos!
Mensuales (confieso no recordar la cantidad exacta, aunque bien recuerdo que se
trataba de una suma irrisoria).
7. Se dice que luego de la embolia, el maestro siguió
componiendo.
El maestro Huízar, en respuesta a una necesidad creativa
interior, aprendió a escribir con la mano izquierda. Así fue como emprendió la
composición de su quinta sinfonía.
8.- ¿Le sobreviven familiares, sabe usted algo al respecto?
Su hija Micaela, autora del libro mejor documentado sobre
Huízar, falleció en fechas recientes, creo que el año pasado. Le sobreviven sus
hijas, nietas de don Candelario, quienes tienen la propiedad de los derechos de
explotación de todo su legado.
9.- ¿Cuándo volverá usted a venir a Zacatecas a dirigir alguna
de las obras de Candelario?
No hay las condiciones para que eso suceda pronto.
10.- Cuénteme sobre las grabaciones de Huízar, ¿existen y en
dónde se pueden adquirir?
Cuando se empezó con las Jornadas
Nacionales Candelario Huízar de la Música Mexicana de Concierto, en 2010,
me acerqué a la compañía disquera propietaria de esas grabaciones, hoy
agotadas. No se interesaron en lanzar una nueva edición, pues no les garantizaba
un buen negocio, según me comentaron. El Estado mexicano tampoco se ha
interesado en este rescate.
11.- Cuéntenos qué está haciendo Sergio Cárdenas, musicalmente
hablando, en este momento?
Justo este año de 2015, cumplo una década como Profesor Titular
de Carrera en la Facultad de Música-UNAM, donde se me ha encomendado su
Orquesta Sinfónica (OSFaM) y la Cátedra de Música de Cámara, además de estar
compartiendo experiencias y conocimiento en el Departamento de Posgrado.
La labor con la OSFaM ha resultado por demás interesante y
constructiva. En la década, hemos abordado más de 175 obras sinfónicas; entre
ellas se incluyen todas las sinfonías de Beethoven y un porcentaje notable de
repertorio mexicano que ha incluido estrenos mundiales así como obras de
Moncayo, Huízar, Enríquez, Ibarra y Revueltas. El punto culminante, hasta
ahora, de esta actividad, lo tuvimos en el verano del año 2013, cuando se nos
brindó la magnífica oportunidad de tocar el concierto inaugural del festival
internacional de orquestas sinfónicas juveniles YOUNG EURO CLASSIC, en la
Konzerthaus, de la capital alemana. La magistral exposición de obras de
Prokofiev, Beethoven y Revueltas, fue premiada por los alemanes ¡con 30 minutos
de aplauso!
Otros aniversarios acaecen también este año: celebro el 30º
aniversario de haber ganado el concurso internacional (101 participantes de 4
continentes) por el cual accedí a la Dirección Titular de la Orquesta Sinfónica
de Hof (Alemania), convirtiéndome así en el primer mexicano (y el único, hasta
ahora) que ha ocupado una posición similar en Alemania.
De igual manera, celebraré el 40º Aniversario de haber sido
designado Director Titular de la orquesta Sinfónica de la hoy Universidad de
Música “Mozarteum”, de Salzburgo (Austria), llegando así a ser el primer
mexicano (y el único, hasta ahora) que ha ocupado una posición similar en
Austria.
Por último, en este 2015 estaré recordando con emoción y
agradecimiento, el 50ª Aniversario de mi debut como Director Musical al frente
de un grupo: un coro infantil que organicé y dirigí (¡a mis 14 años de edad!)
en el concierto de navidad de mi iglesia en Cd. Victoria, Tamaulipas.
Este verano me esperan varios conciertos en Europa, para
retornar a principios de agosto a mi encomienda en la Facultad de Música-UNAM.
©Sergio Ismael Cárdenas
Tamez, el 1 de febrero de 2015.
sábado, 7 de febrero de 2015
CLAUDIO MARIA PERSELLI: Figuras flotando en el espacio.
FIGURAS
FLOTANDO EN EL ESPACIO
Sergiu Celibidache se refería con frecuencia a la imposibilidad de
describir la música con palabras, pues sería tanto como reconocer que la música
es un objeto existente.Por lo tanto, todo lo que uno puede hacer si se intenta
describir las piezas de Sergio Cárdenas que integran este CD, es recurrir a las
metáforas: tersura de líneas, contundencia del trazo, amplitud que envuelve,
frescura perfumada. Lo que es seguro es que la música de Cárdenas, quien fue
alumno prominente y amigo de Celibidache (desde 1977 hasta la muerte del
célebre director rumano en 1996), es música que cautiva, que atrae para
compartir con nosotros su riqueza y generosidad.
Ya los títulos de las piezas son
indicios del sendero por el que nos llevará esta música. A veces el sendero lo
constituyen trazos eólicos de gran nitidez y tersura que ocupan el
espacio; a veces son surcos
telúricos de perfiles contundentes. Otras veces son nubes de un humo que quiere
elevarse y no puede, hasta que desaparece en sí mismo.
La música de Sergio Cárdenas no sólo es de una inconfundible actualidad,
sino que también rinde homenaje a otros dos compositores , mexicanos como él
mismo, cuyas piezas están envueltas por el espacio de la historia, evocando un
pasado aún vigente.
Cárdenas el compositor nos
transmite un perfil universal: no sólo domina los más diversos estilos con
acabada maestría , sino que también es un cosmopolita, como lo confirma el
hecho de que las piezas incluídas en este CD fueron compuestas en tres lugares
diferentes: Ansbach, Alemania (Marchita
el alma e Intermezzo), Guanajuato, México (Gavota, Scherzino Mexicano y
Malgré tout) y Banff, Canadá (Mensajero
Alado y la Suite Material no
Abrasivo).
La Bagatela para flauta y cuerdas Mensajero
Alado, compuesta en mayo de 1997 durante su primera estancia
como ‚Artista en Residencia‘ del Banff Centre for the Arts, de Canadá, está
dedicada a la memoria de Ludwig Baumann (1929-1993), mecenas y amigo de
Cárdenas. Es una pieza ágil y vital en la que sopla un viento ligero y
aromático. El „mensajero alado“ (la flauta) escribe y describe el contenido de
su mensaje en el espacio, trazado con acrobacias coquetas o con recuerdos
traídos con tranquilidad a la memoria, siempre apoyado por ese tapete volador
que constituyen las cuerdas, que flotan con este mensajero participando de su
mensaje.
El desamor que respira Marchita el alma, del
compositor silaoense Antonio Zúñiga, recibe un trato altamente cromático en
esta fantasía con la que Cárdenas asume su postura ante la conocida canción
mexicana. Se trata, en realidad, de un homenaje a la pequeña gran música del
México romántico, música que, sin negar su influencia europea, lleva el sello
característico de la provincia mexicana: un sello de intimidad, de añoranza, de
un cierto aire idílico que aún distingue a muchas regiones mexicanas..
En el mismo tenor deben ser
comprendidas las Fantasías sobre
diversos temas de Manuel M. Ponce,
uno de los compositores mexicanos más admirados por Cárdenas. Me parece
acertada la afirmación de la musicóloga mexicana Yolanda Moreno (cito de
memoria):“el gran mérito de Ponce es haber otorgado a la canción popular
mexicana ‚carta de naturalización‘ de las salas de concierto de México“. Estas
pequeñas piezas, de formas compactas, rigurosas pero no rígidas, son en todo
momento piezas cantables y, por lo tanto , respirables, con un aire que
purifica y revitaliza, refresca y perfuma, que nos susurra sus secretos con
gran fuerza evocativa, trasladándonos a un ayer aún presente.
Abrasión, nos dice el
Dicccionario Austral de la Lengua Española, es la acción y efecto de raer o
desgastar por fricción. Este es el contexto en el que hay que entender la Suite para Orquesta de Cuerdas Material no Abrasivo.
„Mucha de la música contemporánea“, nos dice Cárdenas, „nos provoca una
reacción espontánea de rechazo porque su primer impacto parece raer nuestros
oídos. En esta Suite he intentado componer una música que sin dejar de ser
actual, tampoco provoque rechazo en sus oyentes, una música en la que el sonido
contemporáneo per se no sea un
obstáculo en el camino hacia la experiencia musical, es decir, una música que
aspira a ser experimentada más allá de su propio sonido.“
Material
no Abrasivo fue compuesta en Banff, Canadá, en septiembre de
1998. Su primer movimiento, Humo Azul en la Penumbra (dedicado a Albert Baumann), recurre a
elementos del jazz para transmitirnos una nostalgia sobre la que reflexiona un
violín, tratanto (sin lograrlo) de liberarse de ella. El segundo movimiento, Leyenda de la Luna Llena
(dedicado a Roberto Tamez-González), es un murmullo un tanto álgido, nervioso y
contenido, que se desliza sobre los campos y sobre las aguas, como si la piel
de la tierra vibrara por el beso que le deposita el resplandor de la luna
llena.
„Siempre he admirado la fuerza y
la vitalidad de los rancheros, de los campesinos, de la gente que tiene un
trato diario con el suelo, con la tierra. Es gente que, por lo general,
desarrolla un enorme sentido de identificación con los fenómenos naturales, a
los que responde con sabiduría y respeto. A diferencia de la población urbana,
los hombres del campo tienen un sentido del espacio y de los ámbitos de la
amplitud que no es siempre entendido por aquélla. Es esta poderosa
identificación con la naturaleza la que los hace ser tan vitales.“ (Cárdenas
dixit). Resulta claro, entonces, porqué Cárdenas recurrió al conocido huapango El Carretero como tema central (melodía original de R. Fuentes) de esta Vitalidad Ranchera,
que está dedicada a Francisco Tamez-González.
© 1999 Claudio
Maria Perselli, Firenze, Italia.
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